Capítulo 36

La transacción se estaba llevando a cabo en la planta baja.
Pascual entró y miró a Cristina con una expresión de sospecha antes de decir:
—Sr. Navarro, el cuadro de Sra. Navarro alcanzó los noventa y nueve millones novecientos mil euros. Sr. Pousa les desea a usted y a la Sra. Navarro bien.
—El resto de tus arreglos —Gonzalo dijo.
Esto iba a ser una asociación comercial con Sr. Pousa.
Al fin y al cabo,las palabras hicieron que Gonzalo se sentía feliz.
Pascual volvió a mirar a Cristina y se retiró de nuevo con la mente desconcertada.
Aquel inútil de Cristina, había utilizado un lápiz para dibujar un cuadro con la textura de una pintura a tinta en un breve lapso de tres minutos.
Si la pintura era abstracta o no, pero esta habilidad de dibujo, incluso un gran pintor no podría hacerlo.
Al pensar en ese cuadro, Pascual tuvo que volver a deplorarlo, siempre con la sensación de que el cuadro que vale más de 99,9 millones de euros. Fue hecho una fortuna por Sr. Pousa.
O tal vez, sobreestimó a Cristina.
De pie junto a Cristina, Gonzalo no le preguntó nada, sino que alargó la mano y le frotó la cabeza: —Es estupendo.
Desde el momento en que ella había dejado el pincel, él había notado que sus emociones no eran normales.
Había una tristeza intensa y un odio intenso.
?Qué tipo de emoción estaba poniendo en ese cuadro?
Cristina había estado inmersa en el dolor de su vida pasada, pero cuando escuchó este cumplido de Gonzalo, no pudo evitar reírse:
—?Crees que soy una ni?a?
—?Por qué no? —Gonzalo le preguntó.
Cristina no se atrevió a decir que no.
Gonzalo volvió a cogerla en brazos y dijo:
—Si tienes algo en mente, dímelo, yo lo resolveré.
Cristina no se movió, así que se quedó obedientemente en sus brazos y dijo:
—Bien.
Tal vez estaba acostumbrada a ser fuerte sola en su vida anterior. Así que cuando tenía a alguien en quien apoyarse, no podía evitar bajar la guardia.
—El siguiente es el último artículo de la subasta de la noche, nada menos que el gran final del espectáculo, el anillo de diamantes misterioso. ?Por qué misterioso? porque este anillo de diamantes viene de la dise?adora Clarita...
Cristina escuchó las palabras del presentador, dejó ferozmente los brazos de Gonzalo y se acercó a la ventana para mirarlo.
Incluso sin asomar la cabeza, fue capaz de ver la pantalla de abajo cuando la gran pantalla se acercó a ella.
La pantalla era ahora solo una caja de brocado y el presentador estaba hablando de los orígenes del misterioso anillo de diamantes.
—Este anillo de diamantes se llama la Predestinación con un total de 999 diamantes rotos y zafiros de colores degradados. Justo el a?o anterior la Princesa Sylt quería pagar 500 millones por este anillo de diamantes, pero Clarita le rechazó.
Mientras el presentador explicaba, la caja de brocado se abrió lentamente permitiendo a la gente ver la verdadera aspecto del Anillo de Diamantes de la Predestinación.
Era un anillo de dise?o muy bonito y único. Debido al engaste de diamantes rotos, el anillo brillaba con un cambio de color gradual bajo la luz.
El presentador dijo:
—Ahora que la misteriosa identidad de Clarita está expuesta, para rezar por su mejor amiga, Isabella. La ha donado especialmente para ser subastada con fines benéficos...
Gonzalo se limitó a mirar el anillo de diamantes y luego miró a Cristina.
Sus ojos estaban fríos mientras miraba el anillo de diamantes en la pantalla, sus delgados dedos agarrando el borde de la ventana con fuerza.
Como intentaba retener algo, sus u?as ara?aban el borde de la ventana crujiendo.
Lo primero que ocurrió fue que tuvo que romperse las u?as si seguía rascándose así.
Gonzalo alargó la mano y estrechó a Cristina en sus brazos.Cogió sus dos peque?as manos y sostenerlas en las suyas.
Sus manos eran tan peque?as y tan suaves.
—Ahora vamos a poner un peque?o vídeo grabado por Clarita para ver cómo es este misterioso dise?adora —El presentador dijo.
Venganza tras renacimiento
Detail
Share
Font Size
40
Bgcolor